jueves

Alex Jones - Por qué sigue vivo

http://www.youtube.com/watch?v=lncxoqMAHhI

Yo soy real. Lo siento. Tengo una mujer, la llaman y la amenazan.
Yo soy real. Lo sé. Yo había predicho a 11-s. Yo entrevisté a un tal rotschield.
Yo soy real. Lo vivo. No me pueden matar es que habrían construido a un héroe.
Y no les apetece eso. Lo que hago. Lo que soy. Lo que siento. Creo en dios.

Alex Jones es un derechista extremo de estados unidos. Posee un par de armas y las sabe usar y cuando llegará tiempo lo hará. Los europeos que confian en su razón liberado para siempre pueden dejan de leer, los démocratas, los liberales, los socialistas, los anarquistas, los de izquierda, los de derecha, los del centro, los de la periferia, los hermanos, los que confian en la discusión y en la justicia y en la república y en otras cosas guay que nos hemos inventado aquí. Alex Jones es un facha, un republicano, que más bien no vota, o vota a ron paul, al que hay que oír para poder tomar la decisión sobre quién es, es un conservativo, un conservador que tiene ideas semejantes a los que piensan que en europa se hallan en la izquierda y sin enbargo no están capaces de encontrarse en ninguna parte, es Alex Jones, nadie te puede decir quién es el matrix, tú tienes que verlo por tí mismo. Alex Jones tiene cierta cantidad de información. Él dice que se la curró. Puede ser.

Alex Jones es real. Me lo creo. Es el único que entró en una reunión secreta de los que tienen verdadero poder. La toma no tiene mucha calidad de hecho no se ve casi nada. El fuego. Un búho grande. El resto es como el caso de asesinato de kennedy. Si quieres ver la pistola la verás. Está allí. Bien apuntada. En el momento justo para el disparo. El conductor da la vuelta. Apunta. Dispara. La cabeza da marcha atrás. El cerebro sale del cráneo. La tía intenta salir del coche pero esto ya no sale en la película de zapruder. O tienes otra posibilidad. Mirar el juego de los reflejos del sol en el coche de jotaefeká y ver clara mente que no se trata de un arma sino de la cabeza lisa del tío que está sentado al lado del conductor. Lo que cada uno quiera. Pero Alex Jones es real lo dice él. Hay unos que dicen que es un agente de cia y que todo lo suyo es una desinformación así que su información que se considera ser una información alternativa e independiente y por eso más correcta no sé sabe por qué pero se siente que es así vuelve a ser desinformación sobre la desinformación dado que la desinformación en realidad se llama información. Es complicado. Se denomina la era de informaciones. Eres tú y tus pantallas.

Nos han llevado hasta tener que confirmar a los demás que somos reales. O esto ha pasado por sí sólo, natural mente, sin que nadie tire las cuerdas de la realidad sin que alguien haga algo. Alex Jones dice quién es él que nos ha llevado hasta el paisaje de nuestros miedos y nuestras dudas y nuestras confusiones y nuestros sueños. Para empezar, tenemos bastante problemas ya con la aceptación de que existiesen unos cuantos tan poderosos para mandar a algo tan grande como la globalización. Pero parece que sí que los hay. No salen en la tele ni dan entrevistas a los periódicos. Ellos poseen las fuentes de información oficiales las reales las únicas que te in-forman-de-todo-en-el-tiempo-real. Ahora. Mañana. Todos los días. Todas las semanas. Todo el año. Nosotros. Estábamos emitiendo antes de que naciste y seguiremos haciándolo a la humanidad hasta que ya no podrás abrir tus ojos jamás y luego también.

En qué cree la red. Quién se ha inventado el sector de los servicios. Por qué no es posible enterrarse de la historia de los bancos y de sus relaciones con la vida real de los estados y de los pueblos cómo es posible que algo tan importante en nuestra sociedad no está descrito en docenas y docenas de libros. Cómo que no existe la historia desde el punto de vista financiero. Económico. Las guerras no las pierden las naciones, las aldeas crecen de la misma forma como las setas, sino las empresas, las industrias, unas familias ricas pierden su fortuna, para cuánto tiempo no se sabe, es que falta la información. Es privada. Qué ven los ojos de la red. Y si ya está el internet controlado qué pasará luego ahora. Y si sólo nos necesitaban para que nos enchufemos a sus portales personales es que les salió más barato. Nos hemos acostumbrado a la red y ahora ya pueden a permitirse el lujo de decirnos que existen. Ellos. Tienen muchos nombres. Siempre ha sido así. Gobernaban desde las sombras del cielo y bajaban sólo de vez en cuando y exclusiva mente un poco.

Son los que organizan la vida de los bancos. Alguien tiene que hacerlo es que las oficinas no se mueven tanto por sí solas. Nunca salen de allí unas plantas unas hojas de hierbe en las grietas del suelo o un pájaro curioso a un nuevo espacio interior. Alex Jones habla sobre quién maneja el espectáculo. Hay unos que dicen que la cultura está viva. Los humanos somos unos animales. Nada supranatural. Nada extraordinario. Nada ajeno a la vida. La ciudad es natural. La civilización es crear la artificialidad y nada más. Los bancos existen. Los estados se hallan. La red se mueve. Las películas se ponen. Los árboles se protegen. Los blancos creen universal mente sobre todo en sí mismos y se ven bien lo que produce que quieren ayudar a los otros a ser como nosotros lo que produce la globalización lo que no es nada más que una proliferación de la mente blanca mente razonable y sensata y tal por todo el mundo en todas las direcciones dentro de todas las imaginaciones marcando los principios y los fines completa mente a nuestra forma de ser. Vamos in-formando el mundo. Lo hacemos nosotros. Porque se los creemos.

Qué no te pierdas entre las informaciones.
Qué el dios siga viendo tus pasos, alex.
Qué la fuerza te acompañe.
Qué los que vienen sepan que el hilo de la vigencia nunca se rompe.
Qué el universo no se pueda organizar y qué el día de la mañana perderán de nuevo.
Qué nunca conseguieran apagar el sol.
Qué volvamos a sentirnos reales.
No todos lo conseguirán pero alex jones, por ahora, va por buen camino.
Un día me dejaré de buscar en el mundo de las informaciones.

Nosotros ya no tenemos un emperador anticristiano que nos persigue, sino que hemos de luchar contra un perseguidor aún más insidioso, un enemigo que adula; no nos flagela la espalda sino que nos acaricia el vientre; no nos confisca los bienes (dándonos así la vida), sino que nos enriquece para darnos muerte; no nos empuja hacia la libertad encarcelándonos, sino hacia la esclavitud invitándonos y honrándonos en su palacio; no golpea nuestro cuerpo, sino que se apodera de nuestro corazón; no nos corta la cabeza con la espada, pero nos mata el alma con el dinero» (Hilario di Poitiers, Contra el emperador Constancio 5).






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